De la serie Masters of Horror es, hasta ahora, la mejor que he visto. ¿Han leído a H.P. Lovecraft? Bueno, puedo decir que esto es casi un cuento suyo llevado a la pantalla.

Todo empieza con Ralston buscando a una vieja hechicera, suplicándole que reviva a su esposa recién muerta. Ella se niega, pero ante la insistencia del joven accede, con la condición de que escuche primero una historia, y si al final de la misma el aún desea que su esposa camine esta Tierra de nuevo, ella la revivirá con gusto.

La historia nos situa en la Europa de Frankenstein, la ciencia esta en auge y el conocimiento científico es preciado por sobre todo. Las supercherías son desestimadas… excepto por el vulgo, el populacho siempre creerá en sus antiguas tradiciones, en claro contraste con los alumnos de las recién creadas universidades.

Pues resulta que un joven estudiante de medicina, Ernst Haeckel, decide seguir los pasos de Victor Frankenstein y tratar de reanimar a los muertos. Fracasa, pero se entera de la existencia de un nigromante, el Profesor Montesquino, y resuelve ir a ver su espectáculo de feria, y probarlo un truco. El nigromante revive a un pobre can atormentado ante la sorpresa de todos.

Su padre enfermo empeora y tiene que viajar a pié a Windsor, donde vive. En la noche de camino decide descansar a cubierto de una celosía de concreto, y es espantado sin querer por Walter Wolfram, que le ofrece cobijo y alimento en su casa, en donde conoce a Elise, la hermosísima esposa de Wolfram. Haeckel no entiende como una mujer tan joven y bella sea esposa de un viejo como Wolfram.

La noche pasa sin tropiezos hasta que es despertado por Elise acariciándose frente a la ventana, de cara a la tormenta… y después por los llantos de un bebé. Elise esta amamantando y a la vez discutiendo con su esposo. El Profesor Montesquino hace su aparición y se retira… Elise cada vez mas enfadada y desesperada lo sigue. Wolfram se lamenta y llora sobre la mesa… Haeckel le hace compañía, pregunta el por qué de la presencia de Montesquino, se entera que el bebé no es suyo, sino de un marido anterior y decide ir tras Elise.

Wolfram le advierte y casi ruega que no vaya, obviamente sus consejos llegan a oídos sordos, y no le queda otra que seguir a Haeckel. En el camino se encuentran al can resucitado, en medio de la maleza que conduce al cementerio, iluminado tan solo por la luna llena mientras nubes negras cruzan su cara (no podía ser de otra manera, esto es terror). Escuchan los gritos o gemidos de algo… alguién… Wolfram le dice que su mujer está enferma, también le urge a no entrometerse en asuntos de los que nada entiende. Haeckel testarudo como cualquier joven ante una chica hermosa lo ignora.

Y entonces ve la terrorífica verdad…

Wolfram ya le había dicho en la cena que el (Haeckel) nunca podría satisfacer a su esposa, al notar las miradas que este le dirigía… que ni siquiera el mismo (Wolfram) podía.
Elise al salir corriendo hacia el cementerio dice que ya lleva casi un año, que no puede aguantar mas.

¿Que terrible verdad esconde Elise?

Haeckel mira horrorizado, Elise esta sobre una tumba, bajo de ella un hombre, están en pleno acto sexual, pero ¿en un cementerio? ¡Eso no es natural ni cristiano!

Pero… hay algo raro… no es un hombre vivo, ¡es un nomuerto! Y están rodeados de mas zombies carcomidos por el tiempo y la putrefacción. Así que esto es a lo que se referían, a Elise solo la satisfacen los muertos.
Haeckel lo entiende todo de golpe, Wolfram contrató a Montesquino para que le reviviera a Elise su esposo, y de paso otros cuantos muertos, por si hace falta.

Le exige al profesor que detenga tal horror, pero este le dice que no puede, que nadie puede. Wolfram pierde la cordura y le ruega a Elise que regrese, obviamente dos nomuertos se encargan de destriparlo, Montesquino huye y Haeckel le dispara por la espalda, al acercarse a insistir en que le diga como detener todo, este lo empuja y Haeckel pierde el conocimiento al estrellarse con una lápida.

Todo esto acompañado de los gemidos de placer horroríficos de Elise y sus amantes nomuertos. La vemos desnuda, mojada en sudor, siendo acariciada por manos pútridas y agusanadas, vista por ojos blancos, opacos, en una mezcolanza de andrajos de tela y carne, y ella disfrutando al máximo…

Al día siguiente Haeckel regresa a la casa, Elise esta amamantando de nuevo, ¿Wolfram? Muerto. Elise le pide que cargue a su bebé y se lo muestra… un horror tras otro, pues es hijo de su fallecido esposo. Un horror de criatura de cuya boca mana leche mezclada con pus. Haeckel paralizado por el espanto no puede evitar que el engendro le muerda la yugular.

Y así regresamos con Miz Carnation y su historia, Ralston esta al borde del pánico mismo… se retracta y se dispone a irse, pero lo interrumpe el esposo de la hechicera que entra a la sala, y después aparece otro hombre, con un bebé en brazos, y al bajando las escaleras uno mas… los tres amantes de Elise y su hijo.

Vaya, todo un horror de historia, muy bien lograda, la trama es buenísima y las imágenes son muy poderosas. Es una mezcla del terror paralizante de Lovecraft, los ambientes oscuros de Poe y lo entretenido de las leyendas de Bécquer. De verdad que si pueden poner sus dedos esqueléticos en ella no lo duden, bajenla, si les gusta el terror no se arrepentirán.
Es una historia muy muy perturbadora.

Elise con un nomuerto detrás.

Su podrido esposo acariciándole los senos.

La toma dramática desde arriba de la tumba.

Elise amamantando a su criatura…

… una abobinación a los ojos de dios.

Por cierto, Leela Savasta es la que la hace de Elise, hermosísima sin ninguna duda… pero si el requisito es estar muerto ¡no gracias!

No menos de: