
Nada peor que una película de princesitas… para niños.
Nota: hay spoilers y cuento el final, esta es tan mala que me lo agradecerán.
Esta película pudo haber sido mucho, ¿qué? pues la mejor historia de aventura épica clásica. Tiene dragones, espadas fantásticas, hechiceros, escenarios grandiosos, princesas que rescatar y ese deje de nobleza inalcanzable que toda película de este tipo debe tener.
Pero comencemos: ¿El héroe? Sí, así es, el héroe. Granjero güerito convertido en príncipe valiente. Nada mas barato. Es el héroe de las historietas de cuando uno tiene 4 años. No es un héroe creíble. Todavía el inepto de Potter hace un mejor papel.
Y como todo héroe güerito, hace lo que los güeros hacen, todo al revés, todo mal, arriesgando la vida de los demás por sus ideas estúpidas.
El mentor. Típico, figura varonil con mucha experiencia que esconde mas de lo que imaginamos. ¿A quién se le ocurre matarlo a la primera de malas? Era por mucho el personaje mas interesante.
El malo. Un hechicero muy poderoso que trabaja para el rey que desea dominar el mundo.
Ahora lo verdaderamente malo no es tanto que por su historia no sobresalga nada, sino la ejecución de la misma. El proceso es apresurado, anti-natural. De un granjero inepto pasamos a un experto matador que monta dragones, simplemente increíble. El mundo es muy pequeño, los pueblos están a 5 minutos (a pié) uno del otro, falta esa sensación de un mundo completo.
Por si fuera poco el héroe se convierte en el líder de un pueblo de tipos duros y acostumbrados a sufrir. ¿Ese héroe tan bonito? Ja.
Peor aún resulta que copiaron hasta el cansancio al Señor de los Anillos. Se puede ver a Grima Wormtongue en el papel del hechicero maleta, que es muerto por el héroe güerito inepto. Se puede ver a Saruman comandando sus ejércitos desde lo alto de su torre. Ni que decir del ejército de Uruk-hais que vemos convertidos en 50 o 70 gordos en armaduras baratas.
¿Y los jinetes de Rohan? También los vemos en la forma del pueblo que Charming debe salvar.
¿Elfico? A la orden del día, pero mientras que en el Señor de los Anillos se las ingeniaron para hablarlo con acento y convincentemente (Tolkien inventó varios idiomas para sus libros), en Eragon las palabras soltadas dan… bueno dan risa.
Los dragones. Ese es un tema que merece un post aparte, pero como no vale la pena dedicar tanto a esta película: Pésimos. Jamás he visto imitación mas barata de un dragón. La dragona protagonista es sumisa, tierna, debilucha y de pocas luces. ¿En qué cabeza cabe eso? Los dragones se supone que son criaturas inteligentísimas (mucho mas que los hombres) y además malignas y con mucha malicia; solo se alían a los hombres cuando conviene a sus propósitos. No esperan 1000 años a que el príncipe valiente aparezca y les de ordenes estúpidas.
Pero, ¿escupe fuego, no? Otro error fatal. Las casas productoras se aprovechan de la ignorancia de sus públicos. Cuando Brom (el mentor) muere, Eragon (charming) le dedica un túmulo de piedras sobre el. Saphire (¿qué clase de nombre para un dragón?) dice que aún no puede escupir fuego, pero que si puede hacer otra cosa por Brom, y procede a soplar aire caliente sobre las piedras. Ahora, la temperatura para fundir piedras es altísima, varios miles de grados mas que un simple fuego. Bueno, la dragona funde las piedras y las cristaliza, pero no puede escupir fuego. Ajá, si claro.
Si aún creen que hay algo rescatable están equivocados. El audio.
En el Señor de los Anillos escuchamos batallas increíbles, infinidad de sonidos inundaban la sala, incontables espadas, mutilaciones, gritos, pasos, golpes… era una verdadera orgía de sonidos. Pero en Eragon, que tanto se esforzó por imitar al Señor de los Anillos, se equivocó en cuanto al audio. Sus batallas quedan reducidas al ridículo gracias al pésimo sonido. Tres espadas, dos golpes y 5 gritos hacen una batalla épica. La escena cuando Erangon cae derrotado sobre su moribunda dragona, y ambas armaduras chocan, debía ser audible por lo menos.
Tiene mucho que no veo una película tan ridículamente mal lograda.




