Allá va el río. No hay ningún cambio en el cielo, aunque apenas puedo respirar. Es raro ver la Luna, todavía brillante ahí arriba. Me alegro de que la hayan dejado, aunque se sentirá muy sola ahora…

Childhood’s End, novela de Arthur C. Clarke de 1953 que presenta un final alternativo al asunto del fin de la humanidad.

Justo cuando el hombre esta por salir a la Luna, se produce el contacto. Naves gigantescas sobre todas las ciudades. Resulta que esta raza nueva se da a la tarea de reorganizar a la humanidad. No instauran un gobierno nuevo, pero todas sus acciones van encaminadas a la prosperidad de los humanos. Después de muy poco tiempo ya no hay guerras, ni crímenes. Tampoco hay creatividad, pero eso solamente lo notan unos pocos. Obviamente hay quienes estan en desacuerdo con este cautiverio al que esta siendo sometida la humanidad, pero no es la mayoría. El bienestar y la calidad de vida aumentan a grados jamás soñados. El trabajo es una especie de hobby, todo mundo tiene lo que quiere, y no hay nadie que no pueda viajar a donde le plazca en cualquier momento.

Las gigantescas naves llegan a la Tierra

Peeeero, nadie ha visto a esta raza. Se mantienen encerrados en sus naves y reusan todo contacto. Tampoco se puede ir en su contra ya que son poderosísimos. Imparten sus órdenes a través de las naciones unidas.
No tienen emociones, o no las aparentan, son inteligentísimos y poco mas se sabe de ellos.
Ante la presión, y mas bien de acuerdo con sus planes, anuncian que en 50 años se dejarán ver al fin.
El primer secretario del consejo mundial (que fue posible gracias a los aliens) trató mucho con Karellen, el jefe de estos superseñores, como los llama el vulgo. Ideo un dispositivo con ayuda de un científico que le permitiera ver a Karellen en su última reunión con el, y Karellen no quiso dejar a su amigo en las tinieblas, ya que no viviría 50 años para verlo. Justo cuando activa el dispositivo alcanza vislumbrar a Karellen saliendo por una puerta… y se lleva el secreto a la tumba.

La humanidad es próspera y feliz, es la época de oro del hombre. Aunque mas de uno cuestiona las razones de los aliens. Sobre todo después de que les informaron que las estrellas no son para el hombre. Los millones de estrellas y galaxias son demasiado para nostros en vista de que, antes de que ellos llegaran, no habíamos sido capaces ni siquiera con un mundo pequeñito.

Al final llega el día del plazo y Karellen se deja ver. Los cuernos, las alas, el tono rojizo, la estatura, la cola, la barba puntiaguda… no hay ninguna duda de su identidad.

Pero la humanidad es madura y acepta con facilidad. No son diablos, pero nadie se explica el parecido increíble, y lo mas aceptado es que en algún momento del pasado del hombre se produjo un contacto y fracasó.

Algunos de los superseñores se mezclan con la humanidad, pero no demasiado. Derivado de esto y gracias a una serie de coincidencias (que para los aliens no lo son), un hombre toma una determinación. Se las ingenia para abordar una de sus grandes naves como cargamento.
Estas coincidencias se dieron en una casa en la que el anfitrión tenía la mas extensa colección de libros parafísicos, y por alguna razón a Rashaverak (otro alien) le interesaban. Al final de la fiesta quedaba un grupo reducido y se pusieron a jugar una versión moderna de la Quija. La última pregunta fue una verdadera sorpresa, alguién le dijo a Jan que el no había participado y el pregunto ¿cual es el sol de los superseñores?
Jean, una chica asistente del juego, se desmayó justo después de que la quija dijera NGS549672.

Justo en ese momento Jan, el que preguntó, tomo la determinación. Busco y encontró que esa estrella estaba en la dirección de Carinnae, y decidió arreglárselas para abordar una nave de los aliens. Lo logro a modo de cargamento, muy ingenioso.

40 años luz de ida y otros 40 de regreso, aunque para el habrán pasado poco mas de 4 meses (gracias a la tremenda velocidad de la nave) para la humanidad habrán pasado 80 años, y Jan lo sabe. Pero se arriesga, y logra llegar al mundo de los aliens.

Evidentemente comprende casi nada de lo que ve, un mundo (que no es el original de los aliens, sino que lo llegaron a habitar después) y al final regresa a la Tierra.

Jan visita NGS549672

Mientras tanto en nuestro planeta se produce el cambio que ellos estaban esperando. La metamorfosis comienza. Los hijos de Jean son los primeros en mostrar los síntomas, se muestran con poderes telepáticos y demás cosas paranormales. Sus padres se asustan como es debido y piden hablar con los superseñores. Greggson, el padre, pide hablar con Karellen. Este se los aclara muy sencillamente: no hay nada que hacer, es el destino del hombre, y con el tiempo se expanderá a todos los menores de 10 años aproximadamente. El fin de la humanidad había llegado, el momento era ahora.

Y así fue, como una epidemia todos los niños fueron sufriéndo de los mismos síntomas, y los adultos no podían hacer nada. Karellen hizo su anuncio y la humanidad comprendió que no eran sino pastores, que les habían ayudado a llegar a este término. Y que la otra opción había sido que la humanidad hubiese liberado estos poderes sin control y se hubieran destruido a si mismos, perjudicando a muchos otros sistemas, al universo mismo probablemente, ya que los efectos parafísicos nadie los podía predecir con exactitud.

Juntaron a los niños y los pusieron en un continente, apartados de la humanidad. Mientras que esta se dedicó a morir de la manera que le pareciera mas conveniente. Ya no hubo mas niños, los hombres comprendieron que este era su fin.

Jan regreso a una Tierra ya vacía. Era el el último de nosotros. Había saltado en el tiempo y había vuelto en el futuro, en el ocaso de la raza humana. Karellen le explicó, le mostro a los niños desprovistos de emociones, con caras mas muertas que las de los muertos mismos. Con el tiempo estos dejaron de necesitar comida, Karellen le dijo que era por que habían encontrado métodos de acceder a ella de otras maneras. También le dijo que ellos envidiaban a la humanidad ya que ellos mismos no podían emprender la metamorfosis, eran meros instrumentos en los designios de algo superior que no alcanzaban a comprender y que no conocían, se limitaban a seguir sus ordenes y a la vez trababan de entender lo mas posible de la transformación, con la esperanza de algún día ellos tomar el camino que ahora tomaba la humanidad.

¿Qué era aquello superior incluso a los superseñores? No lo sabían con exactitud, pero no era inadecuado llamarlo la supermente. Ya había incluido en si misma muchas razas, la humana era tan solo una mas. Dominaba el universo y notaba inmediatamente el surgimiendo de la inteligencia. Y mandaba a los aliens a completar el trabajo.

Ellos mismos se encontraban en una especie de atasco evolutivo, no podían emprender ese viaje, y al entender o vislumbrar la realidad de la supermente, esto era un caso trágico. Ellos se quedarían para siempre atrapados en el mundo de la materia, a pesar de dominarlo.

Jan pregunta por que fracaso el anterior contacto, en los albores del alba de la humanidad. Karellen le explicó que, como ya se sabía, el tiempo era mucho mas complejo de lo que los hombres creían, y no era un recuerdo antiquísimo, sino una premonición. No había habido ningún encuentro anterior, no era un recuerdo del pasado, sino del futuro. Era una premonición conocida gracias a que el tiempo es mucho mas complicado de lo que los hombres creían. Era un recuerdo de los últimos años cuando la raza humana se daba cuenta de que todo concluía. Las reverberaciones de estos hechos llegaron al pasado, incrustándose en la memoria racial de alguna manera. Viajando independientemente de la dirección del tiempo experimentada por el hombre, el futuro y el pasado se unían en un solo camino y hace miles de años los hombres vislumbraron entre tinieblas la imagen de los superseñores, produciendo miedo y terror a lo largo de la historia de la humanidad.

Al final, los superseñores se van, ya que los niños estaban en la última fase y habían puestose a jugar con la órbita lunar, por tanto la Tierra ya no era segura. Jan decidió quedarse, y Karellen lo proveyó de aparatos para que les informara como iba la cosa del fin del mundo.

Jan iba informando de los cambios conforme los notaba. La gravedad cambió, parte de la atmósfera se escapo, una torre de energía subía en el horizonte y cubría todo el planeta como una red y el mundo comenzo a disolverse. Vió luz intensísima en el centro del mismo, y eso fue todo.
Karellen le dió la espalda al diminuto sol, alejándose cada vez mas en su nave gigantesca.

Karellen y los suyos se retiran

Por supuesto que:

La frase que pongo al inicio es parte de los cambios observados por Jan y reportados a Karellen al final del mundo, producidos por los niños metamorfeándo, cuando todo empieza a escapar al espacio.
La Luna ha acompañado al hombre desde sus inicios y así resultará hasta el final. Nuestro mundo no es divisible de ella, y resulta imposible pensar en la Tierra sin la Luna, es una idea muy triste pensar que ya no habrá nadie que la observe, nadie que camine en su luz.
Si, definitivamente la Luna se sentirá muy sola.